Aquí hay algunas teorías populares…. . La gran mayoría de las estrellas más brillantes de Kenia nacieron y se criaron en la altura. Correr en elevaciones más altas acumula una mayor capacidad pulmonar, ya que los atletas se acostumbran al aire más delgado. Muchos de los mejores corredores, provienen de la región montañosa que rodea Eldoret, a unos 7.000 a 8.000 pies (2100metros) sobre el nivel del mar. Esta zona también posee un clima bastante suave que permite correr todo el año.
Sin embargo, si la altitud sola determinara el éxito de las carreras de larga distancia , por supuesto, los corredores de maratón nepaleses dominarían. Por lo tanto, tal vez un factor más importante es la cultura de fórmula de la nación, sobre todo entre la tribu étnica Kalenjin. Aunque los Kalenjins representan sólo el 12 por ciento de la población de Kenia, ellos comprenden alrededor de tres cuartas partes de los corredores de élite de la nación. La tendencia comenzó con Kip Keino, quien ganó el oro olímpico en los 1.500 metros en 1968 y añadió un título de carrera de obstáculos olímpico en 1972. El éxito de la ex policía inspiró a las generaciones venideras de Kalenjins, que creció idolatrando a Keino. Como resultado, los Kalenjins ahora aspiran a títulos de distancia (Okayo, estableció un nuevo récord para las mujeres en Nueva York, y es una de las pocas estrellas de maratón de Kenia).
Debido a que el interés en el running es tan alto, la competencia resulta feroz al momento de formar los equipos de running, y los régimenes de entrenamiento son muy difíciles. Muchos jóvenes keniatas ven las carreras de larga distancia como un boleto para salir de la pobreza. Los Kalenjins, en particular, crecen viendo la riqueza del regreso de algunos campeones de maratón, cuyos ingresos en el extranjero, hacen que sean hombres y mujeres ricos para los estándares de Eldoret.
La fisiología y la genética también pueden tener en cuenta en los logros de los keniatas. En el 2000, el Instituto Danés de Ciencias del Deporte publicó un estudio que comparaba la destreza en la distancia de funcionamiento de varios Kalenjin jóvenes, frente a los de una estrella de la pista de Dinamarca, Thomas Nolan. Aunque los chicos tenían sólo tres meses de entrenamiento formal, vencieron fácilmente a Nolan en una carrera de 12 vueltas y media. Los investigadores concluyeron que los keniatas tenían una ventaja al nacer y especularon que podría tener algo que ver con las “patas de pájaro.” (El estudio fue indigananrte para varios héroes Keniatas, incluyendo Keino, que vieron los resultados como una ofensa a la ética del trabajo de Kenia.)
También abundan teorías anecdóticos más oscuros. Se ha sugerido que los niños kenianos son ayudados por el hecho de que muchos corren hacia y desde la escuela. El dos veces olímpico Charles Cheruiyot, por ejemplo, ha declarado que los jóvenes keniatas suelen correr 10 millas por día. Pero otros corredores keniatas de alto vuelo tienen desdeñó esta teoría, negando que hayan tenido que correr para no llegar tarde al colegio.
Entonces, que será?
Correr en Kenia: de vacaciones en las entrañas del atletismo
La atleta Lornah Kinplagat ha puesto en marcha una especie de centro de alto rendimiento para runners en Kenia.
Está situado en la localidad de Iten, cuna del atletismo y a 2.400 metros de altura.
La habitación individual con pensión completa cuesta entre 30 y 36 euros al día.
¿Qué runner no se ha preguntado alguna vez por el físico de
los africanos? ¿Quién no ha soñado con igualar sus éxitos en maratones y
carreras? Ahora mismo, cualquier corredor popular o profesional puede sentirse
keniata durante algún tiempo si tiene la oportunidad de pasar sus vacaciones en
la cuna del atletismo.
La localidad de Iten (Kenia) es desde décadas el
centro neurálgico del atletismo africano. Los mejores maratonianos del mundo se
han curtido por sus caminos de tierra y sus estrechísimas carreteras
secundarias. Situado a unos 300 kilómetros de Nairobi, este pequeño municipio
ubicado junto al majestuoso Valle del Rift se ha convertido en un
lugar de peregrinación por el que pasan cada año cientos de corredores
europeos. Entrenar en altura junto a los grandes atletas keniatas del momento es
un reclamo turístico-deportivo de lo más recomendable para los amantes de la
carrera.
El centro de alto rendimiento se encuentra a unos 300
kilómetros de Nairobi y tiene todas las comodidades
El centro, que cuenta también con residencia, posee también
una piscina de gran envergadura, gimnasio, sauna, biblioteca y hasta una
clínica de fisioterapia. La pista de atletismo en la que se entrenan las
estrellas del running se encuentra a pocos minutos andando de las
instalaciones.
Pasar una o dos semanas en el HATC de Iten puede ser
realmente económico para los runners europeos. Sin contar con el vuelo a Kenya
ni con los desplazamientos hasta el centro de entrenamiento, la estancia y las
comidas allí están al alcance de cualquiera; una habitación individual con pensión
completa, además del café de la tarde, cuesta entre 30 y 36 euros al día.
Independientemente del coste, los corredores que han pasado
por sus instalaciones destacan el ambiente multicultural que se respira.
“Los maratonianos suelen correr por los caminos que
hay en Iten y alrededores a primera hora de la mañana. También hay una pista de
atletismo de tierra, en la que se entrena bien aunque hay mucha gente. Ver a
unas cien personas haciendo series en la pista fue una de las cosas que más me
impactó a la hora de ejercitarme allí” (opinión de Francisco España).
“no hay demasiados entrenadores. Salvo algunas
excepciones, los corredores allí se dejan guiar por algún atleta que haya
competido en Europa. Ellos son los que organizan las series y los que marcan
los tiempos a seguir. Pero realmente no entrenaban con mucha planificación y se
basaban, en la mayoría de los casos, en rodajes muy largos enfocados al
maratón”.
Atletas europeos corren junto a keniatas
¿Cómo llegar hasta Iten?
Hay que llegar a Nairobi (existen varias vias, Dubai,
Bruselas, Zurich) Tras llegar a Nairobi, es recomendable coger un matatu,
una furgoneta, hasta Eldoret y desde allí realizar otro
desplazamiento por carretera hasta Iten.
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