La calidad internacional que Germán Lauro ha demostrado en
las últimas temporadas se afirmó en la mañana fresca y ventosa de este jueves
15, en el Estadio Luzhniki de Moscú. A pesar de que llegaba con algunos
problemas físicos -se había resentido de una lesión lumbar durante sus
entrenamientos en León- finalmente el recordman nacional y sudamericano de bala
pudo ingresar aquí a la fase clasificatoria. Y su registro de 20.09, conseguido
en el primer intento, lo ubicó entre los doce hombres que este viernes disputarán
la prueba decisiva de bala en el 14to. Campeonato Mundial.
Lauro marco 20.07 en el Segundo intento y 19.88 en el último, pero ya su
clasificación parecía asegurada (el corte estuvo finalmente sobre 19.76). La
qually fue dominada por le norteamericano Ryan Whitling con 21.51, el hombre
que, a juzgar por sus resultados del 2013, asoma como el principal favorito. El
checo Laddislav Prasill fue Segundo con 20.90 y luego quedó el bicampeón
olímpico, Tomasz Majewsk *Polonia (con 20.76) y el alemán Dave Storl, quien
saldrá este viernes a defender su corona mundial, con 20.71. Quinto, el
norteamericano Reese Hoffa con 20.42.
No hubo demasiadas sorpresas y entre los que se quedaron afuera estaban el local Maksim Sidorov y el estadounidense Zach Lloyd, quien hacía su debut en el juego grande de la especialidad.
Desde que alcanzara la final del Mundial Indoor en Estambul, en marzo de 2012, Germán se ha instalado cerca de esta elite de la prueba, algo que reafirmó con su sensacional performance olímpica (sexto en Londres 2012) y, en mayo pasado, con su récord sudamericano de 21.26, cuando escolto a Whiting en Doha.
Ahora se ha convertido en el Segundo argentino en este Mundial (luego de Comba en disco) y cuarto del historial que llega a una final mundialista. Los anteriores fueron Antonio Silio en los 10 mil metros de Stuttgart 1993 y Jenny Dahlgren en martillo, Daegu 2011.
Con Lauro habría posibilidades de ilusionarse con un puesto todavía mejor, pero habrá que ver en qué condiciones físicas y de confianza afronta esta final, que se disputara el viernes desde las 20.10 (hora local, las 13.10 en la Argentina).
EN una temporada irregular para la elite, como suele ocurrir en las postolimpicas, Whitling es el nombre dominante por sus 22.28 en Doha y sus 22.11 del reciente Campeonato Nacional. Quiere unir el título mundial al que ya consiguió en pista cubierta. Las únicas dudas son por algún toque de irregularidad, que le ha costado en grandes torneos.
Su compatriota Hoffa quiere, a los 35, recuperar la corona que lograra en Osaka 2007 y convertirse en el más veterano de los campeones de bala. El barbado Hoffa tiene experiencia sobrada en este nivel y, como mayor registro del 2013, los 21.71 en los Drake Relays.
Frente a ellos estarán los dos europeos que los han batido con cierta frecuencia en torneos relevantes. En el caso de Majewski, bicampeón olimpico, la duda es si ha recuperado totalmente su forma, luego de la operación en el hombro que tuviera en diciembre pasado. Ha competido con frecuencia en las últimas semanas, tratando de recuperar ese espíritu competitivo. El otro es el más joven, el aleman Dave Storl, quien saldrá a defender su corona mundial conseguida en Daegu. Sabe que tiene todo el potencial y el futuro para él.
No hubo demasiadas sorpresas y entre los que se quedaron afuera estaban el local Maksim Sidorov y el estadounidense Zach Lloyd, quien hacía su debut en el juego grande de la especialidad.
Desde que alcanzara la final del Mundial Indoor en Estambul, en marzo de 2012, Germán se ha instalado cerca de esta elite de la prueba, algo que reafirmó con su sensacional performance olímpica (sexto en Londres 2012) y, en mayo pasado, con su récord sudamericano de 21.26, cuando escolto a Whiting en Doha.
Ahora se ha convertido en el Segundo argentino en este Mundial (luego de Comba en disco) y cuarto del historial que llega a una final mundialista. Los anteriores fueron Antonio Silio en los 10 mil metros de Stuttgart 1993 y Jenny Dahlgren en martillo, Daegu 2011.
Con Lauro habría posibilidades de ilusionarse con un puesto todavía mejor, pero habrá que ver en qué condiciones físicas y de confianza afronta esta final, que se disputara el viernes desde las 20.10 (hora local, las 13.10 en la Argentina).
EN una temporada irregular para la elite, como suele ocurrir en las postolimpicas, Whitling es el nombre dominante por sus 22.28 en Doha y sus 22.11 del reciente Campeonato Nacional. Quiere unir el título mundial al que ya consiguió en pista cubierta. Las únicas dudas son por algún toque de irregularidad, que le ha costado en grandes torneos.
Su compatriota Hoffa quiere, a los 35, recuperar la corona que lograra en Osaka 2007 y convertirse en el más veterano de los campeones de bala. El barbado Hoffa tiene experiencia sobrada en este nivel y, como mayor registro del 2013, los 21.71 en los Drake Relays.
Frente a ellos estarán los dos europeos que los han batido con cierta frecuencia en torneos relevantes. En el caso de Majewski, bicampeón olimpico, la duda es si ha recuperado totalmente su forma, luego de la operación en el hombro que tuviera en diciembre pasado. Ha competido con frecuencia en las últimas semanas, tratando de recuperar ese espíritu competitivo. El otro es el más joven, el aleman Dave Storl, quien saldrá a defender su corona mundial conseguida en Daegu. Sabe que tiene todo el potencial y el futuro para él.
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