Cuando Daniela Torres cruzó la meta en el Tuscany Camp
Maratón, pensó en su madre. Al observar el crono (2H28:55) y darse cuenta de
que tenía en sus manos la marca olímpica, la seleccionada recordó a su
progenitora, quien falleció hace seis meses.
“La última vez que hablé con ella me dijo que le gustaría
verme competir en unos Juegos Olímpicos, por desgracia ya no pudo estar
conmigo, pero me dio la fortaleza para salir adelante y terminar la prueba.
Sentí un cúmulo de emociones aunadas a todo el esfuerzo que le había dedicado a
mi preparación”, compartió Daniela vía telefónica desde Italia.
La corredora, quien compitió por primera vez a nivel internacional
en los 42.195 kilómetros, destacó la importancia de su fortaleza mental.
“La verdad llegué con muchas dudas, pero mi cuerpo y mi
mente reaccionaron bien; el clima no ayudó pero puse todo de mi parte y se
obtuvo la marca. Es maravilloso materializar un sueño, no hay palabras para
definir lo que siento”.
Torres tendrá un par de semanas de descanso y después
definirá su calendario para los próximos meses.
“Di la marca pero todavía faltan de competir algunas
compañeras, una vez que estén todos los resultados se podrá hacer oficial. En
cuanto a lo que viene serán recorridos de medio maratón, 5 mil o 10 mil metros
para que mis piernas se puedan recuperar”, concluyó.