Hoy es el Día del Deportista, que extensivamente podría considerarse también como el día del deporte y de la actividad física. En este día se trata de reconocer a aquellas personas que han estado involucradas con algún deporte, no siendo patrimonio exclusivo de los que viven del deporte, sino que es para cualquier hombre o mujer que practica algún deporte sea o no de manera profesional.
Todos los 16 de noviembre se celebra el día del Deportista,
dentro de una jornada que busca homenajear y enaltecer al deportista como
promotor de todas las ventajas que adquiere la persona a realizar cualquier
deporte como tal y al nivel que sea posible, no es necesario ser el mejor del
mundo o practicar deportes de alta competencia, no se necesita ser Luciana
Aymar, Manu Ginóbili o Lionel Messi para alcanzar los objetivos principales que
acarrea una actividad física.
Este día debería ser importante en nuestro calendario, es
tiempo de tomar conciencia de la importancia del deporte, ya que es una fuente
de salud, de educación y de encuentro interpersonal y cultural.
Hoy es el Día del Deportista. Esta fecha es tan importante
como cualquier otro día especial de nuestro calendario (el día del trabajo, el
día del maestro, el día de la madre….). Quizá más ampliamente, debiera verse
también como el Día del Deporte y la Actividad Física y Recreativa.
Aquellos hombres y mujeres que han vivido su vida enamorados
de una pelota, de una cancha, un vehículo deportivo, una pista, una raqueta, y
han regalado a su cuerpo la emoción que se siente cuando se está en plena
actividad física, que han sabido lo que es una sonrisa nacida del pleno y
simple gusto por el deporte, hoy deben celebrar. Este festejo no es un
patrimonio exclusivo de aquellos que viven “del” deporte (de quienes se
denominan profesionales), sino de todo hombre o mujer que lo practica, que lo goza
y lo vive, aun en condiciones adversas.
Pero el festejo debe también llevarnos a insistir en la
importancia, en la necesidad, en lo crucial que es para nuestro país que la
actividad física, deportiva y recreativa alcance niveles de importancia tan altos,
tan de Estado, que no sean monopolizados por el sector privado, ni por los
intereses transnacionales. El deporte es una fuente de salud física y
emocional, pero también una posibilidad potente de educación, de encuentro
intercultural e interpersonal (aunque parezca lo contrario cuando los salvajes
generan peleas, trifulcas y ofensas). Cuando un deportista aprende a respetar
al contrario, cuando aprende a ser limpio (aunque no deje ciertas mañitas
deportivas), cuando es respetuoso del cuerpo ajeno, cuando ve a los otros como
simples compañeros del juego, adversarios deportivos, pero no enemigos. Cuando
todo eso se aprende, en el calor de una cancha, se van creando condiciones para
su uso en la vida social en general.
La visión educativa en este siglo no puede dejar de valorar al deporte como una de las vías más importantes para la educación, puesto que los principales esfuerzos van a enfocarse en la sabiduría y salud emocional y física de los seres humanos, en medio de la pérdida de las áreas verdes y de la relación entre humanos y naturaleza. El sedentarismo (en parte causado por una más larga relación con las computadoras) no sólo nos aísla y vuelve más individualistas, sino que también está creando cuerpos más flojos, menos sanos, más pasivos.
Por todo esto, suena realmente escandalosa la postura de
seudoacadémicos que descalifican la actividad física y deportiva, que miran por
sobre el hombro todo aquello que suene a deporte y gozo físico. Como si la
ciencia no viniera ya demostrando que cuanto más salud y actividad física sana
tenemos, más desarrollo intelectual desarrollamos, si todo es complementario.
Si enfatizamos en la integralidad de lo educativo, ¿por qué seguir insistiendo
en otorgar mayor importancia a lo intelectual, y seguir con el descrédito al
deporte, y al arte?
Y también que sirva esta celebración para insistir en el
deporte como práctica, como proyecto de vida, para que en lugar de emocionarnos
con ser simples espectadores (incluso de eventos que no tienen nada que ver con
nuestra realidad), empecemos a protagonizar, aunque sea mediante pequeños
pasos, el gozo de sentir que nuestro cuerpo está activo. ¡Está vivo!
FELIZ DÍA LES DESEA a todos los deportistas, Deportes Villa Adela
por Lic. José Luis Casiva