Hagas deporte o seas más sedentario que el sofá de casa, cubrir una distancia de 400 metros no debería suponer un desafío extremo para nadie. El americano Michael Johnson corrió los 400 metros en 43 segundos y 18 centésimas en el año 1999, cuando marcó el récord del mundo. Claro que él lo hizo en plano y en un estadio. Si la pista se pone muy cuesta arriba, y en lugar de correr por estadio lo haces por la montaña, esos 400 metros se pueden convertir en los más duros de tu vida. Así es la Red Bull 400, una carrera que en 2016 ha cumplido su sexta edición y cuyo record del mundo está en casi cinco minutos.
La idea de la Red Bull 400 nació seguramente un día 1 de enero, que es el único día en que se emite por televisión la famosa prueba de saltos de esquí de Garmisch (Alemania). El ex atleta austríaco Andreas Berger vio la prueba y pensó: ¿qué pasa si en lugar de bajar con esquís hacemos que la gente suba corriendo esa pendiente? Él y su mujer fueron los primeros en probarlo en el trampolino de Kulm, en Austria. Y decidieron que era una distancia y una inclinación dura, pero factible.
La Red Bull 400 nació en 2011 y, desde entonces, centenares de atletas se han animado a recorrer la carrera con los 400 metros más exigente que existe”. Kulm es una de las pendientes más escarpadas del mundo, con un desnivel medio del 45% y un ángulo de ascenso de 37 grados en sus sectores más duros. Entre el primer metro de carrera y el último se supera un desnivel de 180 metros. Aún así, lo más duro de la cursa no es el desnivel, es la combinación del desnivel con la hierba de la montaña, que convierte la “pista” en un terreno resbaladizo muy difícil de superar… y no se permiten piolets ni crampones.
Ahmet Arslan no es tan conocido como Michael Johnson, pero ambos pueden presumir de tener el record del mundo en 400 metros. Uno, en metros lisos, y otro, en metros inclinados. Hasta ahora, este atleta de origen turco ha ganado las tres ediciones del Red Bull 400 y en 2013 obtuvo su mejor marca: 4:57.50, o sea algo más de cuatro minutos más que Johnson. También en 2013 la prueba se ha extendido a otros países: Planica, en Eslovenia, es la segunda rampa que acoge la cursa. Para calibrar su dureza, nada mejor que un vídeo de Red Bull.